Movimiento Juvenil Nacional


El Movimiento Juvenil Nacional somos la suma de iniciativas de adolescentes y jovenes organizados a nivel local y nacional a través de una alianza estratégica, con la participación de adolescentes y jovenes a titulo individual, un movimiento juvenil nacional autonomo e independiente a los intereses de los partidos politicos y grupos economicos.

Visión: construirnos en la organización juvenil nacional de referente no partidaria que es reconocida por la defensa de los derechos sociales, politicos, económicos y culturales de la juventud nicaraguense, desvinculada de los intereses de grupos economicos poderosos.


Mision: luchar por el cumplimiento de los derechos de la juventud nicaraguense y el reconocimiento como sujetos de derecho y elementos estrategicos en la planificación económica que sienta las bases para el desarrollo de Nicaragua, con miembros informados, criticos y conscientes de su rol como ciudadanos.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

“De camping en Bosawás”

Misión: Intercambio cultural con jóvenes como vos y como yo, pero de Bosawás, en Bosawás. Objetivo: Conocer, compartir y asumir la responsabilidad del futuro como jóvenes que somos Resultado: Mucha diversión, grandes lecciones y ganas de compartir con ustedes esta “megaarchi recontra superbuena” experiencia

Esta no es la introducción de un proyecto de clases ni el adelanto de un trabajo monográfico, sino una pequeña crónica de un intercambio cultural a la que el equipo del “suple” se sumó junto con jóvenes de Matagalpa, León, Granada y Managua.
Buscando pistas que prueben que nuestra generación no está hueca y que dentro de sus temas de interés incluyen lo político-social, nos sumamos a la aventura… ¡Y valla que aventura!

Digo, si dos días de viaje para poder llegar al punto de la misión (San Andrés: corazón de la reserva) bañarse en posas que aquí llamaríamos charco -eso cuando tocaba, porque acá en secreto, uno que otro día nos saltamos el baño- dormir en hamacas y racionar el agua, entre otros sacrificios, no cuentan como aventura, entonces necesitamos un diccionario.

Pero todos los sacrificios fueron por la causa de compartir con jóvenes de Bosawás sobre sus costumbres, problemas y sueños. Fue así como aceptamos subirnos a una camioneta y tragar polvo por nueve horas, para luego cambiar de vehículo, subirnos a una panga y navegar trece horas más, haciendo estaciones sólo para lo urgente.

Nuestra recompensa fue la oportunidad de introducirnos al “Pulmón de Centro América”, donde los majestuosos paisajes y la increíble biodiversidad que alberga la reserva de biosfera, nos dejaron tan impresionados como la misma pobreza que hay en las comunidades indígenas que la habitan, y la impotencia de no poder hacer mucho por la degradación del bosque que este grupo pudo observar, y que tenemos la incertidumbre de si podremos heredarla a futuras generaciones.

La experiencia incluía repartirnos en los hogares de la comunidad para conocer de cerca su cultura. De esta convivencia, los chicos coincidieron en que ese pedacito de Nicaragua es como una isla que forma parte del territorio pinolero, pero como que no lo fuera, pues a ellos no les llega señal de TV nacional, periódicos y contadas emisoras.
Que la falta de oportunidades de trabajo ha separado a las familias, pues para llevar el pan de cada día a la mesa tienen que abandonar el nido por largas temporadas.

Que aunque las ambiciones y los sueños por estar a la moda, estudiar y progresar son las mismas de un joven de la metrópolis, las oportunidades no son iguales. Aquí es normal que las adolescentes tengan hijos y marido desde los 13 años.

Que los jóvenes no se sientan representados con partidos políticos porque ningún gobierno hace acto de presencia y lejos de progreso, se sienten excluidos del sistema.
Y que aun estando conscientes del tesoro en el que habitan, su instinto por sobrevivir ante la falta de oportunidades, supera su conciencia ambiental.

Desafortunadamente los chicos, lejos de experimentar la indignación, manifestaron su impotencia ante la imposibilidad de no poder hacer más que compartir.La mayoría se llevará la experiencia que documentarán en sus Facebook, pero en semanas será periódico del ayer y nada cambiará en la Reserva de Biósfera de Bosawás, patrimonio de la humanidad.

Esta aventura fue parte del programa “Salvemos Bosawás”, que promueve el Movimiento Juvenil con el apoyo del Centro Humboldt. La próxima etapa es un concierto al que esperan sumar tanto a artistas como a jóvenes de todo el país. ¡Quizás así se escuche un eco que retumbe en la Reserva!








1 comentario:

Anónimo dijo...

No existe justificación para ningún tipo de Violencia y nosotros fuimos violentados con abuso de poder, gritos y amenazas.. No podemos quedar callados ante el atropello a la integridad de nuestros derechos humanos.. si nos paso a nosotros que luchamos por una sociedad libre de violencia, que podrá pasar con grupos de jóvenes que no están conscientes del abuso solapado en que porque te financian una gira van a querer hacer lo que quieran con vos! Somos críticos al sistema y mantuvimos esa posicion y la tendremos siempre! Apoyo la vivencia de experiencias humanas, de aprendizaje, inclusivas y prácticas.. De verdad no puedo decir que fue una gran experiencia con lideres como los que tiene el Movimiento Juvenil Nacional, ojala tuvieran la oportunidad de cambiarlos porque le haría tanto bien, porque las iniciativas que tienen son buenas, pero los lideres que tienen lo vician todo.