Movimiento Juvenil Nacional


El Movimiento Juvenil Nacional somos la suma de iniciativas de adolescentes y jovenes organizados a nivel local y nacional a través de una alianza estratégica, con la participación de adolescentes y jovenes a titulo individual, un movimiento juvenil nacional autonomo e independiente a los intereses de los partidos politicos y grupos economicos.

Visión: construirnos en la organización juvenil nacional de referente no partidaria que es reconocida por la defensa de los derechos sociales, politicos, económicos y culturales de la juventud nicaraguense, desvinculada de los intereses de grupos economicos poderosos.


Mision: luchar por el cumplimiento de los derechos de la juventud nicaraguense y el reconocimiento como sujetos de derecho y elementos estrategicos en la planificación económica que sienta las bases para el desarrollo de Nicaragua, con miembros informados, criticos y conscientes de su rol como ciudadanos.

lunes, 12 de abril de 2010

Joven colaborador del MJN Recuerda aquel dia fatal

El joven Salvador Mejia colaborador del Movimiento Juvenil Relata a la prensa su testimonio de vida y ek impacto que causo esto en su vida, el joven colabora en el movimiento juvenil por el desorrollo de la juventud nicaraguense y por la expectativa de ver un pais justo y digno para todos y todas los (as) jovenes de Nicaragua.

Accidente de tránsito lo tuvo en coma



* Salvador Mejía relata que andaba divirtiéndosey casi encuentra la muerte

Por: Gloria Picón Duarte

Salvador Mejía ha decidido aprovechar la

segunda oportunidad que le ha dado la vida.
LA PRENSA/G. FLORES

Era la mañana del 25 de mayo del 2001. Un fuerte impacto, luces, oscuridad, dos meses en coma por un accidente de tránsito. Salvador Mejía tenía 19 años al momento del accidente, hacía un mes había empezado la universidad y sus seres queridos ya imaginaban un exitoso arquitecto en el seno de la familia. No fue hasta después de mucha lucha y de un cambio de vida que ese sueño se llegó a cumplir.

Mejía cuenta que el día del accidente era una salida normal de jóvenes que querían divertirse y “buscar vida”.

Sonríe pero luego reflexiona: “Estábamos muertos”. Ese viernes estuvo junto a dos de sus amigos en varios bares, la última parada la hicieron en un casino, camino a su casa.

En la entrada a la Colonia Centroamérica, viajando de la Carretera Masaya hacia Managua, un auto colisionó al vehículo en que iba Mejía y sus amigos.

*Policía intenta esquivar críticas o La comisionada Ana Francisca Martínez, jefa de Seguridad Vial de la Dirección de Tránsito Nacional, intenta responder a las críticas que le han hecho a su institución, tras la escalada de los accidentes, en especial en el que murieron 12 jóvenes luego de participar en un concierto en San Juan del Sur, Rivas, en Semana Santa, y que viajaban en una camioneta, incluso en la tina.

“No fallamos en ese aspecto. La Policía tenía un horario de trabajo hasta un determinado momento de desmovilización del evento, pero se quedó alguien por ahí, no podemos ver a todos. La Policía no falla, la Policía tenía los planes, cuando termina un evento se piensa en la desmovilización, pero no se puede estar esperando a la última persona que se va”, responde Martínez.

La jefa de Seguridad Vial señaló que el plan policial está dirigido en los horarios más afectados por los accidentes, los puntos críticos y las horas pico, pero acepta que hay lugares que están descubiertos.

“No se sabe dónde se va a dar el accidente. En las garitas (determinado puntos de control) siempre tenemos policías permanentes. También está el Plan Carretera que es permanente y en las principales vías. También hay turnos pero son móviles, hay patrullaje, las salidas de discotecas se ven con la vigilancia y patrullaje, y vigilancia y carretera”, sostiene.

Martínez señala que las medidas administrativas van encaminadas a prevenir la accidentalidad.

Sin embargo admite que el problema no se resuelve sólo con la aplicación de la ley, ya que a nivel mundial se ha comprobado que, por muy severos que sean en la aplicación de las normas de tránsito, el problema no se evita, ya que lo principal es la educación y responsabilidad de la persona.

Recuerda que habían tomado licor, pero que no venían muy ebrios. De la persona que los chocó, conductor del otro vehículo, no recuerda nada y nunca se interesó por saberlo.

El promedio de vida al nacer en Nicaragua es de 65 años para los hombres y 70 años para las mujeres, según estadísticas del último censo del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Inide). Sin embargo, debido al incremento de los accidentes de tránsito, muchos jóvenes no superan los 30 años.


CAMBIO TOTAL

Después de casi nueve años del accidente de Mejía, ya no queda nada del joven bacanalero, sólo las cicatrices en su rostro, manos y cuello por una traqueotomía que tuvieron que realizarle.

Sin embargo, una vez que salió del estado de coma, las secuelas fueron muchas: el rencor y la impotencia lo invadieron, no podía hablar ni caminar, su comunicación era a través de la escritura que tampoco era muy clara, porque sus movimientos no eran muy coordinados.

“Yo sólo observaba, tenía gran rencor conmigo, estaba desesperado. Cuando me trasladaron a la casa empezaron a tratarme la depresión, sentía odio conmigo, tenía mucho rencor en mi corazón, no me quería, al inicio culpaba al accidente, no reconocía mi responsabilidad, fue hasta que empecé a buscar a Dios que empecé a tomar fuerzas; una vez que fui con mis amigos a la playa ahí sentí el llamado, ya era hora de cambiar mi vida porque ya la había desperdiciado”, admite Mejía.

Al momento del accidente, Mejía apenas estaba iniciando sus estudios en universidad, pero no fue hasta que se sintió en paz consigo que retomó sus estudios y se graduó con honores en la carrera de Arquitectura.

Él hace un llamado a los jóvenes para que se acerquen a Dios. “Al encontrarlo, uno logra encontrar esa paz que tanto busca, porque ése es el problema de la juventud, tiene mucho rencor y lo lleva hacia ellos, se lastiman bebiendo, buscando escape, al comenzar a amar a Dios se ama uno mismo”, añade Mejía.



LIBERTAD Y RESPONSABILIDAD

Juan José Soza, catedrático de la Universidad Centroamericana (UCA), señala que en la universidad se está dando un fenómeno de que cada vez los estudiantes llegan más jóvenes, sin la suficiente madurez.

El hecho de ir a la universidad, en parte, es una ruptura con el seno familiar.

El joven se abre a la libertad, comienza a fumar, ingerir licor, lleva una vida más libre, toman las riendas de su propia vida estando muy jóvenes y con mayor facilidad se meten al mundo del alcohol y las drogas, lo cual también puede incidir en el problema de los accidentes de tránsito, que se han convertido en un problema de salud pública.

Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), de 2008 a 2009 el porcentaje de muertes más alto perteneció a jóvenes de 21 a 30 años, en los días viernes, sábado, domingo y lunes entre las 16 y las 20 horas.

Este mes ha sido uno de los más violentos en Nicaragua en términos de accidentes de tránsito y los resultados fatales, después del fallecimiento de 12 jóvenes en el departamento de Rivas, durante la Semana Santa. Se le suman cinco más en Managua y uno en Chinandega el pasado viernes. En lo que va del año, 144 personas han fallecido a causa de accidentes de tránsito, según cifras preliminares de la Policía Nacional.

Salvador Mejía ha encontrado a Dios y hace un llamado a los jóvenes a que no desperdicien sus vidas.

LA PRENSA/G. FLORES

Jeninne Horvilleur, miembro del grupo de Personas Unidas por el Dolor y la Esperanza (PUDE), señala que en un concierto —como uno en donde participaron los 12 jóvenes muertos en el accidente en Rivas— se puede presumir la peligrosidad.

Es ahí donde la Policía Nacional debe ser más severa, porque es un lugar donde hay licor, cigarrillos y cualquiera otra cosa.

Pero además hizo un llamado a todas las instituciones a trabajar en pro de la concienciación de los jóvenes, lo que debe ser el enfoque principal.

“Es un esfuerzo conjunto: sociedad civil, familia, autoridades, organismos no gubernamentales, etc, porque a veces se destina plata (dinero) para otras cosas, pero para esto (los accidentes de tránsito) que está provocando un índice de mortalidad mayor a nivel del mundo, no se hace mucho”, dijo.


CIFRAS PODRÍAN DUPLICARSE

La Organización Mundial de la Salud (OM) espera declarar el decenio que inicia en el 2011, como el “Decenio de Acción para la Seguridad Vial 2011-2020”.

La iniciativa tratará de detener el aumento que registran en todo el mundo las cifras de muertos y heridos causados por el tráfico vehicular terrestre.

La OMS reporta que cada año mueren casi 1.3 millones de personas y 50 millones son heridas a causa de los accidentes automovilísticos. Más del 90 por ciento ocurre en los países en desarrollo.

Si no se corrige esta tendencia en todo el mundo, la OMS estima que para finales de 2030 esas cifras se podrían duplicar.

A lo largo del decenio, los Estados miembros trabajarán en la elaboración y la aplicación de leyes para limitar la velocidad, disminuir la conducción bajo los efectos del alcohol y el incremento del uso de cinturones de seguridad, entre otras medidas.

leer mas aqui la prensa

No hay comentarios: